Mini cuento

Coraline descubrió la puerta al poco de mudarse de casa.El edificio era muy antiguo: tenia un desván debajo del tejado, un sótano al que se accedía desde la planta baja y un jardín cubierto de vegetación lleno de viejos árboles de gran tamaño. A Coraline no le gustaba esta casa porque para ella era demasiada vieja. Para amagarse era genial pero para trabajar no tanto. Los vecinos son unos viejos que siempre dan cosas a la niña.

Un día, Coraline se quedo en casa sola, porque sus padres se marcharon de compras. Ella estaba dibujando cuando de un golpe se oye un ruido. Coraline primero se pensaba que era un gato pero no a la segunda vez. Baja las escaleras y se dirige a la cocina, nada, todo estaba normal. Va hasta al comedor, nada. Y se dirige hasta la puerta que descubrió, estaba abierta abrió la puerta y vio a un ladrón que estaba robando cosas de oro que había en la sala. Cuando vio al ladrón empezó a gritar con todas sus fuerzas y se va corriendo hasta el jardín. El ladrón nervioso la persigue. Por suerte sus padres estaban llegando a la casa y Coraline los vio y los contó todo. El ladrón ya no la estaba siguiendo sino que se estaba escapando con su coche. El padre de Coraline enfadado justo al momento que quería llamar a la policía ellos le llama. Le dicen que han encontrado a unos objetos de oro que habían sido robado hace 10 anos, acaban de llegar a la comisería gracias a un hombre llamado Juan Fernández. La policía se dirige hasta la casa para llevar el padre de Coraline hasta la cárcel. La madre y la hija no entendían nada de lo que estaba pasando así que, un policía les contó todo y les pregunto si lo sabía que el padre había robado cosas hace 10 anos. Pero ellas respondieron que no. Y llorando se fueron a casa.